Decía Vito Corleone el Padrino que “la familia es lo primero”. Y sí, lo es, pero no siempre lo demostramos. 

Con estos tips para mejorar las relaciones familiares la piña estará más unida que nunca.

#1 Día sin móvil

Las tecnologías nos unen, pero también nos separan. Muchas veces queremos sentamos con nuestro hijos después de trabajar o hacer nuestras labores y cuando lo conseguimos voilà…la maldita tecnología. 

Netflix, Amazon, HBO, la tele tradicional, Facebook, Instagram, WhatsApp… son muchos los estímulos digitales que tenemos y nadie en la familia es ajeno a ello. La mayoría lo primero que hacemos cuando nos levantamos es mirar el móvil, es un hecho estamos enganchados a estas herramientas.

Por sí mismas no nos hacen daño pero cuando nos pasamos olvidamos todo lo que tenemos a nuestro alrededor.  Pactar un día a la semana sin móvil enriquece las relaciones en familia y mejora la conversación. 

Es complicado, pero hay que intentarlo. Cada niño es un mundo, y la educación emocional aplicada a niños exige tiempo y dedicación.

#2 Nos vamos al cine


El cine le gusta a todo el mundo. ¿No? Bueno, a casi todo el mundo. Elegir una buena película que guste a los hijos no es solo un rato de entretenimiento. El cine engloba mucho más, es un almuerzo previo, un paseo y un debate acerca de la película. 

Resulta sorprendente lo que se aprende de una persona escuchando las reflexiones sobre una película.

#3 Fiesta de los pueblos

Las grandes ciudades tienen cosas muy buenas, es evidente. No hace falta ser Sherlock Holmes para darse cuenta de que ofrecen muchas más oportunidades laborales, facilidades para estudiar prácticamente lo que se quiera o la posibilidad de acudir a muchos eventos cercanos. 

Sin embargo, aunque ciudades como Madrid te puedan dar de todo, también te cierra alguna que otra puerta. 

¿Cómo? ¡Si Madrid es lo mejor! Sí, lo es, pero hay cosas que hay que buscarlas fuera.

Las fiestas patronales, las típicas verbenas de los pueblos en las que suena “Paquito el chocolatero”, son un ejemplo de ello. En las grandes ciudades siempre se vive mirando el reloj, corriendo de lado a lado para coger el metro, el bus, el cercanías o lo que sea. Y nuestros hijos lo normalizan. Es su modo de vida. 

Cuando organizamos un día en una fiesta del pueblo podemos estrechar lazos. Sobre todo si nuestros hijos son adolescentes. Sacarlos de su entorno y mostrarles un lugar festivo cerca de casa, donde casi todo el mundo se conoce, es una idea fantástica que agradecerán. 

No podemos olvidar que para mejorar las relaciones familiares hay que pasar tiempo en familia.

#4 Mejorar las relaciones familiares con un viaje

A veces tenemos que ceder. Si nuestra familia lleva años soñando con un viaje a un lugar espectacular, y siempre y cuando las circunstancias económicas y personales lo permitan, lo mejor es hacerlo. Pero además hacerlo cuanto antes. 

Se trata de una experiencia y un recuerdo asociado a una experiencia muy agradable. Siempre estará ahí y será en familia.

#5 Orientación familiar con profesionales

Cada persona es un mundo. Una familia no deja de ser un sistema que contiene pequeños planetas con formas diferentes de entender la vida. 

Un hecho puede interpretarse de múltiples maneras dependiendo del punto de vista de cada uno. En ocasiones, no somos capaces de comprender lo que demandan nuestros hijos o pareja. Nos parece una locura o una tontería. Con nuestro comportamiento podemos crear una brecha que perjudique la comunicación. 

La confianza en la familia es esencial para sobrellevar el día a día. Una persona externa con los debidos conocimientos puede ayudarnos a entender a nuestra familia. 

¿Para ti la familia es lo primero?