Esta entrevista aborda el tema del duelo en la tercera edad con Esther Meneses, psicóloga especializada en la tercera edad. Para ello se hace un recorrido sobre qué es el duelo, para luego explicar cuándo un duelo es patológico y los rituales y formas de afrontamiento que tenemos las personas para superar el dolor. Tras esto, realiza una distinción con los duelos por fallecimiento en la tercera edad y más en concreto a raíz de la pandemia mundial con motivo de la covid-19. Por último, la entrevistada nos invita a reflexionar sobre la forma de transitar el duelo y nos recomienza ciertos hábitos que llevar a cabo para poder realizar el camino del duelo de forma más satisfactoria.
Normalizando la muerte
Lo primero que nos explica es que el duelo no es una enfermedad, si no un proceso vital, por el que pasamos todos los seres humanos. Es algo normal, siendo la respuesta emotiva a la pérdida de algo o alguien significativo. Pérdidas pueden ser: laboral, de pareja, de lugar, un fallecimiento, es decir, cualquier cambio indica pérdida.
Además, el duelo provoca un desequilibrio psico-emocional y en el cual se debe hacer un proceso de nuevo equilibrio, este proceso es el duelo. Las emociones por las que solemos transitar todas las personas son: desesperanza, angustia, rabia, tristeza, culpa, alivio, soledad… Además, también aparece mucha sintomatología física.
El duelo es un proceso durante el cual se atraviesan diferentes etapas, es un trabajo de elaboración de la pérdida, donde es necesaria una posterior organización a nivel relacional. Si esto no ocurre, puede ocurrir lo que la entrevistada llama duelo patológico. Esto quiere decir que el duelo se estanca, es decir no avanza en el proceso del duelo hacia su resolución.
¿Por qué es más complejo un duelo en la tercera edad?
Existen varios factores que complican el duelo; Esther, psicóloga especializada en la tercera edad, en concreto se centra en el factor de la edad. En los mayores, parece que existe una mayor dificultad a la hora de elaborar el duelo. Una de las razones que nos explica la entrevistada tiene que ver con que el fallecimiento de la pareja en la tercera edad implica características diferentes por la propia diferencia que tienen en su entender las relaciones matrimoniales. Es decir, los abuelos viven en simbiosis por lo que cuando pierden a la pareja están perdiendo una parte de ellos importantes, es como si perdieran parte de su identidad. Además, la persona en su momento vital ya se encuentra con multitud de pérdidas: de visión, de memoria, de movilidad, de autonomía, de habilidades… Es una sumatoria de duelos.
Por otro lado, la entrevistada expone la diferencia cultural de las diferentes generaciones en el tratamiento de los momentos de pérdida. Partiendo de la base de que no nos enseñan a como pasar un duelo, muchas veces los seres queridos de esa persona mayor, los que le acompañan de manera primaria en la adaptación a la pérdida, responden con mensajes de tipo “estate bien por nosotros”, forzando en la persona que no se permita sentir, que no pueda sentir, estancado aún más el dolor que está sintiendo.
¿Qué tener en cuenta en situación de pandemia?
Si nos centramos en la actualidad, ahora mismo parece que hay otra variable a tener en cuenta y es la situación de pandemia en la que estamos. No poder despedirse de sus seres queridos, o el deterioro cognitivo que está habiendo en nuestros mayores con motivo del aislamiento que están sufriendo, son variables que afectan a la elaboración del duelo.
La contención emocional
Para afrontarlo, se recomienda primero hacer una contención emocional, es decir un espacio donde pueda expresarse, donde pueda hablar sin juicio ni censura ni presión. Así mismo, hábitos de autocuidado básicos, tales como nutrición, sueño, llamar por teléfono a alguna amiga. Ciertos rituales también facilitan la elaboración del duelo, como encender velas, meditar, rezar, escribir una carta (una carta tanto de los sentimientos que tiene como hacia la persona que ya no está).
Por último, la entrevista termina explicando cómo son los protocolos de actuación desde la CCAA: lo primero que se hace es una llamada de valoración general, para ver cómo está la persona; tras esto se realiza un informe y con él se plantea el seguimiento de acompañamiento directo.
Como conclusión, la entrevistada, psicóloga especializada en la tercera edad, expone, de nuevo, como el duelo es algo normal. Es algo que implica cambios, y que esos cambios pueden doler, pero también traen nuevas oportunidades de desarrollarnos.
Cualquier duda que te pueda surgir, cualquier problema que te resuene con una situación personal o de alquien que conozcas, hablemos.